Por Alexandra Wenzel
Alexandra Wenzel es miembro de la red de embajadores del Pacto. Participó en la COP 28 de Dubai.
Del 30 de noviembre al 12 de diciembre, más de 70.000 delegados de todo el mundo se reunieron para las negociaciones internacionales anuales sobre el cambio climático, la 28ª Conferencia de las Partes (COP 28) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). La COP 28 se celebró en Dubai bajo la presidencia de los Emiratos Árabes Unidos (EAU). Los discursos, declaraciones y decisiones de la COP 28 están disponibles aquí.
“No hay justicia climática sin derechos humanos”. Esta declaración pudo oírse durante toda la COP 28. El 3 de diciembre, la sociedad civil se vistió de blanco en solidaridad con los derechos humanos y los palestinos. Numerosas acciones y eventos paralelos destacaron ese día la necesidad de garantizar que la acción climática se base en los derechos humanos. En la conferencia “Human Right to a Healthy Environment – What Next?”, los panelistas reflexionaron sobre el seguimiento del reciente reconocimiento del derecho a un medio ambiente sano por parte de la Asamblea General y el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. David Boyd, Relator Especial de la ONU sobre Derechos Humanos y Medio Ambiente, subrayó la necesidad de proteger este derecho consagrándolo en un protocolo adicional al Convenio Europeo de Derechos Humanos.
Otro tema fue la protección del espacio cívico para proteger los derechos humanos y lograr una acción climática real. Muchos negociadores y actores de la sociedad civil lucieron cordones de color rojo brillante con la leyenda “derechos humanos y espacio cívico para la acción climática”.
En un acto paralelo titulado “Land and Environmental Defenders: advancing climate justice”, defensores indígenas del medio ambiente hablaron de su trabajo y de la intimidación a la que se enfrentan por parte de gobiernos y empresas. También habló un miembro de Global Witness, que señaló que más de 1.390 defensores han sido asesinados desde que se firmó el Acuerdo de París. En otro evento, “No climate justice without human rights: civic space for a fossil free future”, los oradores subrayaron la necesidad de proteger los derechos civiles y políticos en todos los espacios, incluidos los países que acogen la COP.
La COP 28 comenzó con la histórica adopción del Fondo para Pérdidas y Daños. Sin embargo, sólo se han comprometido 700 millones de dólares para el fondo. En un evento titulado “Loss and Damage, Human Rights, and Corporate Accountability”, estas promesas se calificaron de “miseria” (peanuts en inglés) en comparación con los miles de millones de dólares de financiación necesarios.
La COP 28 concluyó el primer balance mundial, una evaluación del progreso colectivo hacia el cumplimento de los objetivos climáticos del Acuerdo de París. Sin embargo, las Partes no lograron ponerse de acuerdo sobre la formulación de una acción climática basada en los derechos humanos. No obstante, en un momento histórico, las Partes se pusieron de acuerdo sobre una transición para abandonar las energías fósiles.